Pocas cosas resultan más previsibles que las palabras de un artista que presenta un nuevo disco. Rara vez se alejan de ese manido desfile de tópicos que cualquiera podría recitar sin vacilar: intimista, personal, arriesgado, maduro… Y todos ellos podrían describir Corazones, el último trabajo de Mikel Erentxun hasta la fecha. En esta ocasión dejaremos los clichés a un lado y nos limitaremos a escuchar a las canciones: Corazones es un ejercicio de equilibrio, dignidad y oficio.
— CONTENIDO RELACIONADO —